ESTOS ESCRITOS NO ENSEÑAN, NI CONFORTAN NI GUÍAN, Y LA INQUIETUD QUE ESCONDEN ES SOLAMENTE MÍA...















PARAFRASEANDO A ENRIQUE GONZÁLEZ MARTÍNEZ.







1 de julio de 2008

El Casting


He estado leyéndote en un libro, ayer re-escribí la historia; puse de villano a tu servidor y que está vez fuera de sustancia metafísica porque como sabes el desamor siempre duele y la protagonista se condujera apegada a tus gustos y modales, lo que no me gusto de ella que era muy tú; el héroe de que fuera un tipo nada complicado. La historia resultó un éxito que está a punto de ser rodada en la calle por donde vivo; hoy he visto una gran fila de jóvenes para que les practicaran el "casting" y me he puesto a pensar que esos papeles a nosotros nos corresponde porque nos sale muy natural...

Lectura Urbana


"Aquí no suceden cosas más extraodinarias que las rosas".

Carlos Pellicer.


En la calle cincuenta y seis esquina Industria, florecieron rosas de papel, algunas de lata y otras de vidrio y una que otra de varilla y alambrón.

El día fue reportado como extraviado por un Señor voluminoso, llamado Calendario (al punto del desmayo) los médicos señalaron que le dio una fuerte insolación. Dichas rosas, se treparon por todos los edificios, se enredaron por todos los cables; causando cortes seguidos de energía eléctrica e interfirieron todos los teléfonos. El día lloró como un bebé, marchitando todas las rosas de papel y oxidando a las de varilla, lata y alambrón.

El tráfico se hizo denso a causa de los automovilistas imprudentes que atropellaron a las rosas de vidrio y de lata, averiándoles los neumáticos. La policía, por su parte, ocupó todas las rosas que pudo reclutar (aquellas de varilla y alambrón), para formar una malla protectora para los niños de la primaria que salían a las seis de la tarde. Los jóvenes del barrio, pintaron en una barda rosas y escribieron en ella una leyenda barroca en estilo “graffiti”: LAS ROSAS PERMANECERAN.

Tengo que describir (por pura curiosidad más mía que la del lector), que el comercio informal se gradúo en honores, por que las rosas resultaron ser el primer producto original que nacía en el Barrio de San Juan Bosco, tan es así, que decidieron en forma unánime pagar impuestos por la ganancia obtenida de las rosas.

Al final, el día fue encontrado, jugando a las escondidas con los niños de la primaria, el tráfico volvió a la normalidad, las líneas de los teléfonos restablecidas junto con la energía eléctrica y los policías disfrutan, en este momento, una confortable taza de café en el OXXO, las muchachas se retiran a sus hogares adornadas con rosas entre sus cabellos, los tiángueros anunciaron venta nocturna, por lo tanto, aquí dejo mi narración, ya que en mi abrigo irrumpió un capullito rosado creo que es de papel. Todo esto sucede, -si Usted se encuentra- en la calle cincuenta y seis esquina Industria; el día y la hora, mi estimado Señor, es sólo un pretexto.